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Retrato de Chris Connor

Intentemos algo juntos. Inspira profundamente para contar: uno, dos. Y exhala lentamente: uno, dos, tres, cuatro. En este momento tu ritmo cardíaco se está reduciendo. Repite 10 veces y tu mente acelerada hará lo mismo.

Este es uno de los consejos de Chris Connorspara conseguir un momento de atención plena en el día a día. Mejor aún si puedes centrarte en la naturaleza, dice. Mira el cielo, un árbol, el mar si tienes suerte. "La naturaleza está siempre presente. No tiene otro lugar donde estar". Ah, y apaga tus notificaciones.

Es el final de la primavera y la voz norirlandesa de Chris es suave y tranquila, cada palabra considerada y decidida. Bajo el brillo del sol matutino de Ibiza -su hogar durante los últimos ocho años- recuerda que creció en una Belfast devastada por la guerra. "Esa experiencia me llevó a buscar la paz", reflexiona.

Alrededor de 1999, viajando por los monasterios y ashrams de China, India y Japón, Chris se topó con la meditación, un "acto sencillo que desafía nuestra compleja mente". Para él, se ha convertido en una práctica vital. "No se trata sólo de sentirse bien; la meditación te guía a través de las turbulencias emocionales y los desafíos físicos", dice. "Pero no había nada parecido cuando volví a Londres". Así que lo hizo él mismo: no sólo se convirtió en profesor de meditación y entrenador de personificación, sino que también creó espacios físicos para la atención plena.

Este es uno de los consejos de Chris Connorspara conseguir un momento de atención plena en el día a día. Mejor aún si puedes centrarte en la naturaleza, dice. Mira el cielo, un árbol, el mar si tienes suerte. "La naturaleza está siempre presente. No tiene otro lugar donde estar". Ah, y apaga tus notificaciones.

Es el final de la primavera y la voz norirlandesa de Chris es suave y tranquila, cada palabra considerada y decidida. Bajo el brillo del sol matutino de Ibiza -su hogar durante los últimos ocho años- recuerda que creció en una Belfast devastada por la guerra. "Esa experiencia me llevó a buscar la paz", reflexiona.

Alrededor de 1999, viajando por los monasterios y ashrams de China, India y Japón, Chris se topó con la meditación, un "acto sencillo que desafía nuestra compleja mente". Para él, se ha convertido en una práctica vital. "No se trata sólo de sentirse bien; la meditación te guía a través de las turbulencias emocionales y los desafíos físicos", dice. "Pero no había nada parecido cuando volví a Londres". Así que lo hizo él mismo: no sólo se convirtió en profesor de meditación y entrenador de personificación, sino que también creó espacios físicos para la atención plena.

Cuando meditas internamente, estás observando el mundo interior; con esta técnica, ayudamos a las personas a enraizarse en la vida real.

- Chris Connors, fundador

Vistas de Ibiza

En Londres, Chris suele meditar en los bancos del parque de Berkley Square, rodeado de su "catedral de árboles". "Hay mucho tráfico y ruido, pero cuando meditas eres capaz de estar con todo eso", añade. Pero en OPO no todo consiste en navegar por un mapa de portales; en cualquier lugar y a cualquier hora se pueden realizar meditaciones matutinas que potencian la serotonina, sesiones de 12 minutos diseñadas para refrescar el cerebro o descomprimir antes de acostarse. Los huéspedes de Domus Stay disfrutan de un acceso exclusivo a programas de sueño y frecuencias de sonido que regulan el ritmo circadiano y combaten el jetlag.

OPO tiene un atractivo ilimitado, más aún cuando se abren portales en todo el mundo. Y en el lugar de nacimiento de la aplicación, Ibiza, donde el alma es atraída por el magnetismo de Es Vedrà, se sienten como una extensión natural del paisaje. La isla ha abrazado durante mucho tiempo la cultura consciente, desde las fiestas y rituales de los fonetistas hasta la era hippy y los ritmos baleares de los años 80. Hoy en día, explorar la constelación de portales de OPO en Ibiza es abrazar una conexión aún más profunda con esas colinas alfombradas de pinos y los escarpados acantilados de arcilla roja, independientemente de si se aterriza en la Isla Blanca para una semana o para toda la vida.

"Hay algo en la frecuencia de Ibiza que reúne la belleza de la naturaleza y el sonido", piensa Chris en voz alta. Aumenta la energía con una meditación al amanecer en la aislada Cala Nova o deja que tu mirada se dirija a Formentera desde las orillas de Las Salinas. Sin embargo, quizá sea el paisaje sonoro de Cala Conta el que tiene un efecto más profundo en los usuarios del OPO. Chris nos explica la experiencia: ritmos de house ambiental inspirados en el Café del Mar mientras el sol se esconde en el horizonte. "La mayoría de la gente, cuando se sienta allí, se le saltan las lágrimas", sonríe. "Es hermoso y te abre el corazón. Una experiencia muy conmovedora".