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Casa del patio De Rosee Sa

Max De Rosee y Claire Sa revelan la historia que hay detrás de su renombrado estudio de arquitectura y sus atmosféricos diseños.

"Para nosotros, la buena arquitectura significa crear espacios que evocan emociones". Es fácil ver cómo la filosofía de Max De Rosee y Claire Sa -fundadores de De Rosee Sa architects- se traduce en sus proyectos de arquitectura e interiorismo. Evitan un estilo propio y, en su lugar, se proponen crear hogares considerados, bellamente elaborados y adaptados a su entorno. "Nuestro enfoque es casi forense. Conocemos a nuestros clientes, su estilo de vida y su zona. Estudiamos la estructura existente del edificio, si la hay", explica Max. Es este proceso de respuesta, libre de prejuicios, el que les ha hecho ganar una serie de premios.

No es de extrañar que Max y Claire hayan establecido una práctica tan exitosa. Ambos recuerdan una temprana fascinación por la arquitectura y un deseo infantil de expresar su creatividad, ya sea dibujando coches o haciendo ropa. Después de iniciarse en grandes estudios, crearon De Rosee Sa en Notting Hill en 2007, ofreciendo un servicio integral que abarca desde el diseño de interiores hasta la creación de muebles, pasando por la búsqueda de antigüedades y obras de arte. "Siempre tratamos de diseñar espacios que mejoren la calidad de vida y proporcionen un escenario bello pero práctico para las historias de nuestros clientes. Ese ha sido siempre el centro de nuestra práctica, desde el concepto hasta la finalización", dice Claire.

No pasó mucho tiempo antes de que sus visiones atemporales se ganaran la reputación de respetar la historia de un edificio a la vez que elevaban la individualidad de un espacio, lo que a su vez llegó a una clientela internacional. La pareja ha consolidado su presencia en Europa, abriendo oficinas en Portugal y Bélgica. El equipo, de mentalidad abierta y que valora la colaboración, trabaja en cooperación con sus homólogos europeos, así como con diseñadores y artesanos externos de todo el Reino Unido. La pareja atribuye su creciente familiaridad con diferentes tipologías de edificios y materiales locales a su perspectiva y experiencia internacional.

Tanto si se trata de un ático londinense de estilo art-de-vivre, como de una cabaña a orillas de un lago en Bélgica o de un granero rústico en Somerset, se presta la misma atención a los detalles, los contrastes y el uso de materiales. Señalan que la armonía entre el color, la textura y la fluidez del espacio es la clave para crear una atmósfera. Conseguir estos elementos es la base del trabajo de De Rosee Sa, además de fomentar una estrecha relación con sus clientes para entender el tipo de espacio que desean.

Siempre intentamos diseñar espacios que mejoren la calidad de vida y proporcionen un escenario bello pero práctico para las historias de nuestros clientes.

- Claire Sa, Directora Creativa

Por ejemplo, su proyecto de Stradella Road, una villa eduardiana de doble fachada que Max y Claire reimaginaron y ampliaron con maestría, y en la que las puertas correderas de cristal, un tejado de formas juguetonas y un vacío de doble altura canalizan la luz y el dramatismo. Aunque la reforma dio un aire totalmente moderno, los arquitectos tuvieron cuidado de conservar la historia de la casa, como pidieron sus clientes, con azulejos geométricos encáusticos en el vestíbulo y suelos de roble en espiga. También es una de sus casas más memorables, gracias a su diseño único y al uso comprensivo de los materiales en los interiores. ¿Pero qué otras casas destacan para Max y Claire? "Nuestros proyectos más memorables son aquellos en los que tuvimos una relación muy fuerte con el cliente", reflexiona Max. "Con Dalling Road, por ejemplo, nos llevamos muy bien con ellos y todavía somos amigos. La Crafted House también supuso un verdadero aprendizaje: colaboramos con el diseñador belga Lionel Jadot, que superó los límites en cuanto a materiales".

Por si la arquitectura y el diseño de interiores no fueran suficientes, De Rosee Sa ha lanzado también una colección de muebles, que está disponible en su tienda online junto con una selección de antigüedades. La demanda de muebles a medida va en aumento y las soluciones estándar no son suficientes, por lo que Max y Claire a menudo diseñan sus propios muebles. Sacar a la venta su propia colección parecía el siguiente paso natural. La mayoría de nuestros muebles han sido diseñados porque no pudimos encontrar las piezas adecuadas en otros lugares". Por ejemplo, Claire diseñó la Mesa Roja porque necesitábamos una que pudiera pasar de seis a doce o catorce asientos sin desentonar", señala Max.

Los productos van desde la mencionada mesa de comedor de color carmesí con patas onduladas acanaladas y un ribete dorado -que ya es una pieza popular entre la exigente clientela de De Rosee Sa- hasta las sillas de bañera en tonos joya y artículos más pequeños como las bandejas festoneadas de alto brillo. Además de su buen aspecto, cada pieza es práctica y considerada: un banco de fresno quemado y ratán con mucho carácter pero de tamaño reducido, un escritorio Klein Blue con dos puertos de acceso a los cables forrados de latón. "Nuestros diseños suelen partir de una necesidad funcional, ya sea un producto que se vea bien pero que ahorre o cree espacio, pero la gama es muy versátil en términos de estética", comenta Claire. Las piezas se inspiran en estilos europeos como el clasicismo francés y utilizan una gama de colores y texturas. El ático que han diseñado en Ladbroke Grove es el escenario perfecto para sus diseños, cuya estética, materiales y paleta de colores se inspiran en la elegancia de los apartamentos parisinos.

La sofisticación y la practicidad son temas recurrentes en la rica cartera de De Rosee Sa, no sólo en el diseño y el ambiente, sino también en la actitud del estudio hacia la planificación y los presupuestos. ¿Y cómo despiertan su creatividad? "La creatividad surge de cosas cotidianas, como ver imágenes o buscar ideas para algo más, pero a menudo es bastante aleatoria. Podríamos estar de vacaciones en algún lugar, entrar en un restaurante y pensar: 'oh, ese es un gran color para una puerta'", revela Claire. "Cuanto más tiempo dediques a salir y a mirar a tu alrededor, más podrás crear esa biblioteca de referencias".

De cara al futuro, Max y Claire predicen que la sostenibilidad será una preocupación creciente en la arquitectura, por lo que el equipo de De Rosee Sa está centrando sus esfuerzos en la búsqueda de soluciones más respetuosas con el clima, como demuestra la encimera de la cocina de su estudio, hecha con tarros de yogur reciclados. "Estamos contentos de que muchos de nuestros proyectos conserven y amplíen los edificios existentes, pero aun así tenemos en cuenta cómo afectarán nuestros diseños al medio ambiente", añade Max. "Intentamos averiguar cómo se puede minimizar el impacto medioambiental de los edificios durante la fase de construcción o a través de los materiales que utilizamos".

Este año se presenta brillante para este creativo estudio de arquitectura. Con interesantes proyectos en Portugal y Bélgica, así como ideas para ampliar su colección de muebles, el estudio espera ampliar su cartera y crear espacios bellos y funcionales en el proceso.