Reconocidos paisajistas comparten sus cuatro mejores consejos para transformar incluso el más pequeño de los espacios exteriores en un oasis urbano.
A medida que el tiempo se vuelve más cálido y los días más largos, es natural que pasemos más tiempo en el jardín. Tanto si tienes una azotea aislada como una parcela más grande, ahora es el momento perfecto para preparar tu jardín para un verano de diversión sin preocupaciones.
Pero, ¿qué debe tener en cuenta a la hora de planificar su santuario al aire libre? Hablamos con los paisajistas Adolfo Harrison, Alexandra Noble, Barbara Samitier y Pollyanna Wilkinson sobre lo que hay que plantar de cara al verano: cómo aumentar la biodiversidad ecológica y la clave para ajardinar pensando en la socialización.
1. Qué plantar ahora
"Abril es un buen momento para plantar nuevas flores y hierbas perennes", dice Pollyanna Wilkinson, fundadora del estudio de diseño de jardines del mismo nombre. "Si tu objetivo es tener un jardín de verano con un verdadero factor sorpresa, debes elegir plantas perennes de larga floración que vayan a trabajar duro durante varios meses, en lugar de flores llamativas, como las peonías".
Imagina tu jardín de verano lleno de plantas resistentes como geranios, nepeta y astrantias, todas ellas tan resistentes como estéticamente atractivas. Para añadir dramatismo -y versatilidad- opte por hierbas ornamentales, que mantienen sus cabezas de semillas durante todo el invierno. Las favoritas de Pollyanna son la Calamagrosis Karl Forster y la Miscanthus Kleine Silberspinne.
Para el diseñador de jardines Adolfo Harrison, que señala que suele haber una pausa en los jardines hacia finales de julio y principios de agosto, los fines de semana de primavera son el momento de llenar el jardín de vivaces sedum, crocosmia y asters para garantizar que los meses de verano que se avecinan sean ricos en vegetación floreciente.
La planificación anticipada también es clave para la diseñadora de jardines Barbara Samitier, que menciona la Acidanthera murialae como una de sus favoritas. Si se planta en abril y mayo, durará todo el verano: "Son flores muy gráciles, elegantes y perfumadas sin esfuerzo", dice, "tienen algo ligeramente exótico y, al mismo tiempo, se ven perfectamente en un jardín inglés".
Con sus brillantes pétalos y su asociación con el mes de agosto, una flor destaca entre las demás para Alexandra Noble: la amapola. La californiana, la amapola del campo y la amapola del opio están entre sus mejores selecciones, aunque si lo que buscas es una paleta de violetas más profunda, la azul húngara o la belleza negra, que ofrece pétalos casi negros.
No olvides el huerto, añade. "Abril y mayo son los meses ideales para plantar acelgas, coles, remolachas, lechugas y rábanos. Si no estás seguro de por dónde empezar, Grow Easy, de Anna Greenland, ofrece consejos accesibles sobre el cultivo de productos comestibles, sobre todo en entornos urbanos, donde a menudo hay que ahorrar espacio".
2. Cómo fomentar la vida silvestre
"¿Qué es un jardín sin vida?", se pregunta Bárbara.
Es un sentimiento que comparte Adolfo, que anima a los clientes a ver su jardín como su propio ecosistema, a considerar el espacio como un hábitat multitexto, en lugar de centrarse en plantas singulares. Cuantas más capas se incorporen, mayor será la variedad de fauna y flora que se mantenga y más dinámico parecerá el jardín desde el punto de vista visual. "La fauna no reconoce las vallas ni los límites, así que piense en cómo interactúa su jardín con los vecinos y el entorno", dice.
Tampoco hay que ser demasiado ordenado, señala Bárbara, ya que las ortigas y el suelo desnudo son entornos perfectos para las orugas y las abejas albañiles. La presencia de agua en un jardín, ya sea un estanque, una piscina natural o un cuenco, también es beneficiosa para la fauna. Adolfo señala que "los jardines traseros y delanteros pueden servir de corredor para la fauna", mientras que Pollyanna añade: "Las cajas para erizos y los hoteles para bichos son formas encantadoras de ayudar a nuestros amigos más pequeños del jardín y fomentar la curiosidad de los niños también".
Es un hecho conocido que las flores ricas en néctar y polen son imprescindibles para atraer a los polinizadores; las plantas preferidas de Alexandra son el verbascum, la zanahoria silvestre, el cardo, los geranios cranesbill y la fresa silvestre. "Dejar zonas de césped sin segar -incluso en pequeños espacios urbanos- fomentará las flores silvestres y ayudará a los polinizadores", afirma.
3. Tendencias de diseño paisajístico a replicar
Hay un sentimiento unánime entre todos los diseñadores de que los jardines se dirigen hacia una estética más suave.
La opción de rellenar los huecos entre las plantas perennes con semillas está ganando popularidad, señala Adolfo: "Se asemeja a la práctica clásica de los jardines caseros. Un enfoque naturalista con un aire de nostalgia". Conseguir este tipo de estética deshecha requiere mucha reflexión: "Confíe en sus jardineros en el proceso y los resultados serán sorprendentes", aconseja.
"Hay una tendencia a dejar de lado los jardines sin alma con pavimentos de pared a pared en los que las plantas son una idea de último momento", dice Pollyanna. "Veo más solicitudes de plantaciones respetuosas con los polinizadores, céspedes naturales y opciones de materiales con carácter: es un paso positivo en la dirección correcta para el planeta".
Dejar zonas de césped sin segar -incluso en pequeños espacios de la ciudad- fomentará las flores silvestres y apoyará a los polinizadores.
- Alexandra Noble
4. Qué hay que tener en cuenta cuando se diseña pensando en el entretenimiento veraniego
Al diseñar los espacios exteriores, piensa en el día en su conjunto, dice Barbara. "Puede que tengas amigos que se queden a dormir; ¿qué tal un café al sol de la mañana? Conoce tu jardín y toma nota de dónde pega el sol a lo largo del día".
Una vez que se ha identificado dónde están las trampas del sol, es importante preguntarse cómo se quiere experimentar esa luz, añade Adolfo, que cree que una pérgola de jardín es una estructura ideal para socializar a lo largo del día, gracias a su relación adaptable con la iluminación. "Durante el día, el sol se filtra a través de la pérgola para crear una agradable luz solar moteada; hay una atractiva conversación entre la luz y la sombra. Por la noche, sin embargo, ocurre lo contrario: se ilumina la pérgola desde dentro de su edificio, lo que proporciona iluminación durante toda la velada".
Para Bárbara, la iluminación nocturna debe crear magia; utiliza siempre LED de bajo voltaje, de color blanco cálido o amarillo para conseguir un brillo suave. Complementa con linternas y luces a pilas en la mesa y en el suelo.
Pollyanna revela que el entretenimiento en verano es casi siempre la primera prioridad en los informes de sus clientes. "Pregúntese cuántas personas espera entretener regularmente. El tamaño lo es todo. Si es demasiado pequeño, se sentirá aplastado; si es demasiado grande, el espacio puede parecer estéril. Los espacios de entretenimiento deben tener una sensación de cerramiento sin que se sientan abarrotados".
Los muebles de jardín también deben poder moverse con facilidad, así que ten en cuenta las dimensiones de tu jardín a la hora de elegir las mesas y las sillas, coincide Alexandra. Un consejo de todos nuestros jardineros: intenta tener más de un espacio utilizable, para tener flexibilidad a la hora de recibir visitas y dar una sensación de dinamismo a tu jardín.
Y si necesitas una dosis de inspiración al aire libre, Adolfo recomienda recurrir a las redes sociales. "Estamos constantemente expuestos a imágenes de paisajes exquisitos -de esos que te recuerdan a tus mejores vacaciones-, todo lo cual se puede conseguir en casa con una arquitectura y un diseño paisajístico muy cuidados."